jueves, 25 de noviembre de 2010

Explícito II (poesía)

Entre tus manos y mi carne
se halla mi piel encendida,
de banal deseo ardiente
en los albores del día.

Lenguas doradas de locura
descienden raudas por mi espalda,
furiosas estallan
[harto húmedas]
ahogando en éxtasis mis ansias.

Inquieto miro tu rostro
vencido ya por el fuego;
enmudecen mis brazos,
en tu cuello,
y nos absorbe el silencio...